Rúbrica Temporada de zopilotes Por Aurelio Contreras Moreno

Rúbrica
Temporada de zopilotes
Por Aurelio Contreras Moreno

La desesperación con la que sus promotores y aplaudidores han buscado
minimizar la anulación de la llamada “Ley Nahle”, jurando que la secretaria de
Energía está “más fuerte que nunca” en su aspiración para ser gobernadora de
Veracruz, demuestran exactamente lo contrario.
Más allá del tema legal –Nahle nunca estuvo impedida debido a su residencia en
Coatzacoalcos, más allá de los cargos que ha desempeñado en la Ciudad de
México en los últimos años-, el golpe, como se mencionó en la entrega anterior de
la Rúbrica, fue más de bien de índole política, pues el grupo que impulsa su
candidatura quedó evidenciado como perpetrador de fraudes a la ley.
Además, el tropiezo de la zacatecana sirvió para abrir por completo la carrera por
la sucesión en la gubernatura de Veracruz, a la par de la que se librará por la
Presidencia de la República.
Hoy por hoy, en Morena solo hay dos contendientes reales para suceder a
Cuitláhuac García Jiménez –cuyo sexenio ya está muerto, políticamente hablando,
mientras él nada de “a muertito”-: la propia Rocío Nahle García, que a pesar del
revés jurídico y político sigue contando con la venia –condicionada a que la
refinería de Dos Bocas funcione este año- del presidente Andrés Manuel López
Obrador para que se mantenga en la contienda, y el diputado federal Sergio
Gutiérrez Luna, cuyo principal activo es el apoyo que abiertamente le ha dado el
secretario de Gobernación y también aspirante presidencial Adán Augusto López
Hernández.
De hecho, la candidatura a la gubernatura en Veracruz estaría “amarrada” también
a la definición a nivel federal: una eventual postulación de Claudia Sheinbaum
favorecería las aspiraciones de Rocío Nahle, como la de López Hernández
incidiría para que Gutiérrez Luna pudiese ser el abanderado morenista en la
entidad. Aunque nada hay que impida una combinación diferente. Al final del día,
la decisión final la tomará una sola persona, como en los tiempos de la
“presidencia imperial” tricolor.
Porque eso de que las principales candidaturas se resolverán a través de una
“encuesta” es una tomadura de pelo para encubrir la aplicación del
tradicionalísimo “dedazo”, el clímax de la cultura priista que Morena lleva en su
ADN político como un tatuaje. Prerrogativa que, por supuesto, ejercerá sin dudarlo
un presidente tan a la “antigüita” como es López Obrador.
La incertidumbre provocada por el activismo electoral desbocado y sin frenos de
Sheinbaum, López, Nahle y Gutiérrez ha soltado a la “jauría” dentro de Morena, el
recargado nuevo partido oficial, donde de la misma manera como sucedía en los
“mejores” tiempos del PRI, se van a destrozar entre ellos por la ambición de
mantenerse o alcanzar el poder, ante una aparente seguridad de que la sucesión
se va a resolver hacia adentro.
Y es que en el bando opositor siguen sin dar trazas de nada. A nivel nacional la
alianza PAN-PRI-PRD navega en arenas movedizas, mientras que en Veracruz se

manejan varios nombres pero nadie realmente se ve que esté haciendo trabajo
político a nivel estatal. Y faltando año y medio para la elección, eso casi equivale a
entregar la plaza a quienes tienen el control de la maquinaria electoral, jalaron a
su “causa” a los viejos “mapaches” del antiguo-nuevo régimen y cuentan con una
millonada de dinero con la cual organizar una elección de Estado en toda la línea.
Entre tanto, las “cuchilladas” por la espalda, golpes bajos y zancadillas están a la
orden del día dentro de la neoclase política veracruzana, donde al parecer su
ignorancia no les da para entender que las peores venganzas se dan entre
“camaradas de partido” cuando se disputan el poder.
Como dijo la propia Nahle en un tuit publicado apenas la Corte falló en contra de la
fracasada reforma constitucional que fue motejada con su apellido: es “temporada
de zopilotes”.
Y los despojos de algunos pronto serán carroña hedionda.
El nuevo amigo de Rocío
Hablando de zopilotes, a Rocío Nahle le salió un nuevo “defensor” en redes. Ni
más ni menos que el ex gobernador Javier Duarte, quien en su acostumbrada
sección “tuiteo desde el bote y nadie me lo impide”, escribió que “el Art. 116 de la
Constitución Federal establece claramente los requisitos para ser Gobernador y
nos guste o no, @rocionahle los cumple. Todo lo demás es ignorancia o grilla”.
Como le contestaron ahí mismo, alguien quiere que lo saquen de la cárcel.
Email: aureliocontreras@gmail.com
Twitter: @yeyocontreras

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